Mira a todo soberbio, y humíllalo, Y quebranta a los impíos en su sitio.
Humíllalos con una mirada; pisa a los malvados allí donde están.
Con una mirada derriba a todo ser soberbio, aplasta, donde se encuentren, a los impíos.
Observa a todo arrogante, y humíllalo, Quebranta a los impíos en su sitio,
Con tu mirada humilla al arrogante, aplasta de un golpe a los malvados.
Fíjate en esos malvados, y aplástalos donde se encuentren;