Y muchos de los que habían creído venían, confesando y dando cuenta de sus hechos.
Muchos de los que llegaron a ser creyentes confesaron sus prácticas pecaminosas.
Muchos de los que habían aceptado la fe venían a confesar y exponer todo lo que antes habían hecho.
Y muchos de los que habían° creído, acudían, confesando y declarando sus prácticas.
Muchos de los que habían abrazado la fe confesaban y denunciaban las prácticas supersticiosas a que se habían dedicado.
Muchos de los que habían creído en Jesús le contaban a la gente todo lo malo que antes habían hecho.