Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.
Entonces Dios miró todo lo que había hecho, ¡y vio que era muy bueno! Y pasó la tarde y llegó la mañana, así se cumplió el sexto día.
Dios vio que todo cuanto había hecho era muy bueno. Y atardeció y amaneció: fue el día Sexto.
Y vio ’Elohim todo lo que había hecho, y he aquí estaba muy bien. Y fue la tarde y fue la mañana: El° día sexto.
Contempló Dios toda su obra y estaba muy bien. Y transcurrió la tarde y la mañana: el día sexto.
Mientras Dios admiraba la gran belleza de su creación, cayó la noche, y llegó la mañana. Ese fue el sexto día.