Sus manzanas y sus brazos eran de lo mismo; todo era una pieza labrada a martillo, de oro puro.
Los brotes de almendro y las ramas eran de una sola pieza con el tronco de oro puro labrado a martillo.
Los capullos y los brazos formaban un cuerpo con el candelabro. Todo ello era de oro puro macizo.
Sus cálices y sus brazos eran de lo mismo. Todo él estaba labrado a martillo en una sola pieza de oro puro.
Las corolas y los brazos formaban cuerpo con el candelabro, todo ello de una pieza de oro puro, trabajada a martillo.