Cuando alcanzó a verla Judá, al instante la tomó por ramera, porque ella se había cubierto el rostro.
Y la vio Judá, y la tuvo por ramera, porque ella había cubierto su rostro.
Judá la vio y creyó que era una prostituta, porque ella tenía el rostro cubierto.
Al pasar Judá por dicho lugar, pensó que era una prostituta, pues tenía la cara tapada.
Cuando Judá la vio, la consideró ramera,° pues ella tenía cubierto su rostro.
Judá la vio y creyó que se trataba de una prostituta, pues se había cubierto el rostro.