Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





Lucas 21:8 - Biblia Arcas-Fernandez (Nuevo Testamento)

8 El contestó: - Tened cuidado, no os dejéis engañar. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: 'Yo soy el Mesías' o 'El momento ha llegado.' No le hagáis caso.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

8 Él entonces dijo: Mirad que no seáis engañados; porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo, y: El tiempo está cerca. Mas no vayáis en pos de ellos.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Él les contestó: —No dejen que nadie los engañe, porque muchos vendrán en mi nombre y afirmarán: “Yo soy el Mesías” y dirán: “El tiempo ha llegado”; pero no les crean.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Jesús contestó: 'Estén sobre aviso y no se dejen engañar; porque muchos usurparán mi nombre y dirán: 'Yo soy el Mesías, el tiempo está cerca'. No los sigan.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Él dijo: Mirad que no seáis engañados, porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: ¡Yo soy!° Y: ¡El tiempo está cerca! No vayáis en pos de ellos.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Él contestó: 'Mirad que no os dejéis engañar. Porque muchos vendrán amparándose en mi nombre, y dirán: 'Soy yo', y 'El tiempo está cerca'. No vayáis tras ellos.

Ver Capítulo Copiar




Lucas 21:8
26 Referencias Cruzadas  

Aparecerán por todas partes falsos profetas, que engañarán a muchos.


Decía: - Convertíos, porque el reino de Dios está muy cerca.


A partir de entonces, Jesús comenzó a predicar diciendo: - Convertíos, porque ya está cerca el reino de Dios.


Entonces os dirán: 'Mirad, está aquí', o 'Está allí'; pero no vayáis, no los sigáis,


Los discípulos le preguntaron: - Maestro, ¿cuándo sucederá todo esto? ¿Cómo sabremos que esas cosas están a punto de ocurrir?


Cuando oigáis alarmas de guerras y revoluciones, no os asustéis. Aunque todo eso ha de suceder primero, todavía no es inmediato el fin.


Yo he venido de parte de mi Padre, pero vosotros no me aceptáis; en cambio, aceptaríais a cualquier otro que viniera en nombre propio.


Por eso os he dicho que moriréis en vuestros pecados. Porque, si no creéis que 'yo soy el que soy', moriréis en vuestros pecados.


por lo que Jesús añadió: - Cuando levantéis en alto al Hijo del hombre, entonces reconoceréis que 'yo soy el que soy' y que no hago nada por mi propia cuenta; solamente enseño lo que aprendí del Padre.


¿Ignoráis acaso que los que hacen el mal no tendrán parte en el reino de Dios? No os llaméis a engaño: ni los lujuriosos,


Que nadie os engañe con palabras fariseas. Estas cosas son las que encienden la ira de Dios sobre los hombres que se niegan a obedecerle.


¡Que nadie os desoriente en modo alguno! Es preciso que primero se produzca la gran rebelión contra Dios y que se dé a conocer el hombre lleno de impiedad, el destinado a la ruina.


En cuanto a esos perversos y embaucadores, irán de mal en peor, engañando a los demás, pero siendo ellos en realidad los engañados.


Queridos hijos, andan por ahí muchos pretendidos profetas que presumen de poseer el Espíritu de Dios. Antes de fiaros de ellos, comprobad si verdaderamente lo poseen.


Entre vosotros andan muchos embaucadores, que no quieren reconocer a Jesucristo como verdadero hombre; de esa calaña es el seductor y el anticristo.


Y Juan es testigo de que todo lo que vio tiene el aval de la palabra de Dios y del testimonio de Jesucristo.


Mientras tanto resonó en el cielo una voz poderosa que decía: - Ya está aquí la salvación, y el poder, y el reino de nuestro Dios; ya está aquí la soberanía de su Cristo. Ha sido reducido a la impotencia el que día y noche acusaba a nuestros hermanos delante de nuestro Dios.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos