El que roba a su padre o a su madre, e insiste en que no ha pecado, amigo es de gente perversa.
El que roba a su padre o a su madre, y dice que no es maldad, Compañero es del hombre destruidor.
El que roba a su padre y a su madre, y dice: «¿Qué tiene de malo?», es igual que un asesino.
El que roba a su padre diciendo: '¡No es grave!' es un bandido más.
El que hurta a padre o madre, y dice que no es pecado, Es compañero del Destructor.
Quien roba a su padre diciendo: 'No es pecado', comparte la conducta del bandido.