Números 21:18 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

¹⁸ ¡Pozo que el gobernante cavó con su cetro y que el noble abrió con su vara!» Desde el desierto se dirigieron a Matana;

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹⁸ Pozo, el cual cavaron los señores. Lo cavaron los príncipes del pueblo, Y el legislador, con sus báculos. Del desierto vinieron a Matana,

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁸ Canten de este pozo, que príncipes excavaron, que grandes líderes abrieron con sus cetros y varas». Luego los israelitas salieron del desierto y pasaron por Mataná,

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁸ ¡Pozo que cavaron los jefes, pozo que perforaron los príncipes del pueblo con su cetro y su bastón!' Del desierto subieron a Matana,

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁸ Pozo cavado por jerarcas, Explorado por los nobles del pueblo, Con su cetro, con sus cayados. Y del desierto a Matana.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁸ Pozo que cavaron jefes, que príncipes del pueblo excavaron con cetros, con sus báculos'. Y de Beer fueron a Mataná.

Números 21:18 Referencias Cruzadas

Nehemías 3:1

Entonces el sumo sacerdote Eliasib y sus compañeros los sacerdotes trabajaron en la reconstrucción de la puerta de las Ovejas. La repararon y la colocaron en su lugar, y reconstruyeron también la muralla desde la torre de los Cien hasta la torre de Jananel.

Nehemías 3:5

Los de Tecoa reconstruyeron el siguiente tramo de la muralla, aunque sus notables no quisieron colaborar con los dirigentes.

Isaías 33:22

Porque el Señor es nuestro guía; el Señor es nuestro gobernante. El Señor es nuestro rey: ¡Él nos salvará!

Números 21:17

En esa ocasión Israel entonó este cántico: «¡Que brote el agua! ¡Que cante el pozo!

Números 21:19

de Matana a Najaliel, de Najaliel a Bamot,

Juan 1:17

pues la ley fue dada por medio de Moisés, mientras que la gracia y la verdad nos han llegado por medio de Jesucristo.

Deuteronomio 33:4

Es la ley que nos dio Moisés, el tesoro de la asamblea de Jacob.

Deuteronomio 5:31

Pero tú quédate aquí conmigo, que voy a darte todos los mandamientos, preceptos y normas que has de enseñarles, para que los pongan en práctica en la tierra que les daré como herencia”.

Santiago 4:12

No hay más que un solo legislador y juez, aquel que puede salvar y destruir. Tú, en cambio, ¿quién eres para juzgar a tu prójimo?