Herodes quería matarlo, pero le tenía miedo a la gente, porque consideraban a Juan como un profeta.
Y Herodes quería matarle, pero temía al pueblo; porque tenían a Juan por profeta.
Herodes quería matar a Juan pero temía que se produjera un disturbio, porque toda la gente creía que Juan era un profeta.
Herodes quería matarlo, pero tenía miedo de la gente, que consideraba a Juan como un profeta.
Y quería matarlo, pero temía al pueblo porque lo tenían por profeta.
Y aunque quería matarlo, temía al pueblo, porque lo tenían por profeta.