Tan pronto como la gente vio a Jesús, todos se sorprendieron y corrieron a saludarlo.
Y en seguida toda la gente, viéndole, se asombró, y corriendo a él, le saludaron.
Cuando la multitud vio a Jesús, todos se llenaron de asombro y corrieron a saludarlo.
La gente quedó sorprendida al ver a Jesús y corrieron a saludarlo.
Enseguida, al verlo, todas las multitudes° se asombraron grandemente y corrieron a Él para saludarlo.
Toda aquella multitud, al verlo venir, quedó sorprendida y corrió en seguida a saludarlo.