Cuando vio a Jesús desde lejos, corrió y se postró delante de él.
Cuando vio, pues, a Jesús de lejos, corrió, y se arrodilló ante él.
Cuando Jesús todavía estaba a cierta distancia, el hombre lo vio, corrió a su encuentro y se inclinó delante de él.
Al divisar a Jesús, fue corriendo y se echó de rodillas a sus pies.
Pero, viendo de lejos a Jesús, corrió y se postró delante de Él,
Cuando vio a Jesús desde lejos, fue corriendo a postrarse ante él