―Creo, Señor —declaró el hombre. Y, postrándose, lo adoró.
Y él dijo: Creo, Señor; y le adoró.
—¡Sí, Señor, creo! —dijo el hombre. Y adoró a Jesús.
El entonces dijo: 'Creo, Señor'. Y se arrodilló ante él.
Y él dijo: Creo, Señor. Y lo adoró.
Entonces exclamó: '¡Creo, Señor!'. Y se postró ante él.