Así es la morada del malvado, el lugar del que no conoce a Dios».
Ciertamente tales son las moradas del impío, Y este será el lugar del que no conoció a Dios.
Dirán: “Este fue el hogar de una persona malvada, el lugar de alguien que rechazó a Dios”».
Eso espera a las moradas de los malos y al país que quiere ignorar a Dios.
Ciertamente así son las moradas del impío, Y tal el lugar de quien ignora a Dios.
Así termina la casa del injusto, tal es la suerte de quien a Dios ignora'.