Tú afirmas: “Mi postura es la correcta; soy puro a los ojos de Dios”.
Tú dices: Mi doctrina es pura, Y yo soy limpio delante de tus ojos.
Tú afirmas: “Mis creencias son puras” y “estoy limpio a los ojos de Dios”.
Tú has dicho: 'Es pura mi conducta y soy irreprochable a los ojos de Dios.
Pues has dicho: Mi enseñanza es pura, Y: Soy limpio ante tus ojos.
Tú has dicho: Pura es mi conducta; limpio estoy en tu presencia.