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Jeremías 28:6 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

6 ―¡Amén! Que así lo haga el Señor. Que cumpla el Señor las palabras que has profetizado. Que devuelva a este lugar los utensilios de la casa del Señor y a todos los que fueron deportados a Babilonia.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

6 Y dijo el profeta Jeremías: Amén, así lo haga Jehová. Confirme Jehová tus palabras, con las cuales profetizaste que los utensilios de la casa de Jehová, y todos los transportados, han de ser devueltos de Babilonia a este lugar.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Le dijo: «¡Amén! ¡Que tus profecías se vuelvan realidad! Espero que el Señor haga todo lo que tú dices. Espero que traiga de regreso los tesoros de este templo y a todos los cautivos;

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Haga Yavé que se cumplan tus palabras y que devuelvan todos los objetos de la Casa de Yavé y a todos los cautivos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Dijo pues el profeta Jeremías: ¡Amén, así lo haga YHVH! ¡Cumpla YHVH tu profecía haciendo que los utensilios de la Casa de YHVH y todos los cautivos vuelvan de Babilonia a este lugar!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 dijo así el profeta Jeremías: '¡Así sea! ¡Que Yahveh lo haga así! ¡Que cumpla Yahveh las palabras que has profetizado, haciendo que vuelvan de Babilonia a este lugar los objetos del templo de Yahveh y todos los deportados!

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Jeremías 28:6
22 Referencias Cruzadas  

―¡Que así sea! —le respondió Benaías hijo de Joyadá—. ¡Que así lo confirme el Señor, Dios de mi señor, el rey!


¡Bendito sea el Señor, Dios de Israel, desde siempre y para siempre!» Y todo el pueblo respondió: «Amén», y alabó al Señor.


¡Bendito sea el Señor, el Dios de Israel, eternamente y para siempre! ¡Que todo el pueblo diga: «Amén»! ¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!


Bendito sea el Señor, el Dios de Israel, por los siglos de los siglos. Amén y amén.


Bendito sea por siempre su glorioso nombre; ¡que toda la tierra se llene de su gloria! Amén y amén.


¡Bendito sea el Señor por siempre! Amén y amén.


Así cumpliré el juramento que les hice a vuestros antepasados, de darles una tierra donde abundan la leche y la miel, como la que hoy tenéis vosotros”». Yo respondí: «Amén, Señor».


Pero yo no me he apresurado a abandonarte y dejar de ser tu pastor, ni he deseado que venga el día de la calamidad. Tú bien sabes lo que he dicho, pues lo dije en tu presencia.


¿Acaso el bien se paga con el mal? ¡Pues ellos me han cavado una fosa! Recuerda que me presenté ante ti para interceder por ellos, para apartar de ellos tu ira.


Dentro de dos años devolveré a este lugar todos los utensilios que Nabucodonosor, rey de Babilonia, se llevó de la casa del Señor a Babilonia.


«Ve hoy mismo a la casa de Josías hijo de Sofonías, que es adonde han llegado de Babilonia los exiliados Jelday, Tobías y Jedaías.


Cuando estas aguas de la maldición entren en tu cuerpo, que te hinchen el vientre y te hagan estéril”. Y la mujer responderá: “¡Amén! ¡Que así sea!”


enseñándoles a obedecer todo lo que os he mandado. Y os aseguro que estaré con vosotros siempre, hasta el fin del mundo.


Y no nos dejes caer en tentación, sino líbranos del maligno”.


De otra manera, si alabas a Dios con el espíritu, ¿cómo puede quien no es instruido decir «Amén» a tu acción de gracias, puesto que no entiende lo que dices?


Todas las promesas que ha hecho Dios son «sí» en Cristo. Así que por medio de Cristo respondemos «Amén» para la gloria de Dios.


y el que vive. Estuve muerto, pero ahora vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del infierno.


Entonces los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y dijeron: «¡Amén, Aleluya!»


»Escribe al ángel de la iglesia de Laodicea: Esto dice el Amén, el testigo fiel y veraz, el soberano de la creación de Dios:


Los cuatro seres vivientes exclamaron: «¡Amén!», y los ancianos se postraron y adoraron.


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