luego se volvió hacia el lado oeste y lo midió: doscientos cincuenta metros.
Rodeó al lado del occidente, y midió quinientas cañas de la caña de medir.
y lo mismo el lado occidental, doscientos sesenta y cinco metros.
Midió, por último, el lado oeste con su vara y encontró que tenía quinientas varas.
Se volvió hacia la parte del poniente y midió quinientas cañas, medidas con la caña de medir.
Por fin se volvió al lado oeste y midió quinientas cañas de la caña de medir.