Cuanto a ti, habla de modo conveniente y ajustado a la sana doctrina.
Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina.
Tito, en cuanto a ti, fomenta la clase de vida que refleje la sana enseñanza.
Tus palabras deben fortalecer la sana doctrina.
Pero tú habla lo que conviene a la sana doctrina:
Tú, en cambio, predica lo que es conforme a la sana enseñanza: