Séate mi oración como incienso en tu presencia, y el alzar a ti mis manos como oblación verpertina.
Suba mi oración delante de ti como el incienso, El don de mis manos como la ofrenda de la tarde.
Acepta como incienso la oración que te ofrezco, y mis manos levantadas, como una ofrenda vespertina.
¡Suba a ti mi oración como el incienso, mis manos que a ti levanto sean como la ofrenda de la tarde!
Mi oración está aquí como incienso en tu presencia, Mis palmas elevadas como ofrenda de la tarde.
que ante ti se haga valer como el incienso mi plegaria, mi manos levantadas como la ofrenda de la tarde.