No profanes a tu hija, prostituyéndola, que no se entregue la tierra a la prostitución y se llene de crímenes.
No contaminarás a tu hija haciéndola fornicar, para que no se prostituya la tierra y se llene de maldad.
»No deshonres a tu hija convirtiéndola en una prostituta, para que la tierra no se llene de prostitución y de perversidad.
No profanarás a tu hija, prostituyéndola; no sea que tu país se vuelva una tierra de prostitutas, un nido de víboras.
No profanarás a tu hija haciendo que se prostituya,° no sea que la tierra se prostituya, y la tierra se llene de perversión.
No profanarás a tu hija prostituyéndola, no sea que se prostituya el país y se llene de inmundicia.