He aquí que mi interior está como vino sin escape, que hace reventar los odres nuevos.
De cierto mi corazón está como el vino que no tiene respiradero, Y se rompe como odres nuevos.
Soy como un barril de vino sin respiradero; ¡como un cuero de vino a punto de estallar!
Dentro de mí hay como un vino que fermenta, y que revienta los odres nuevos.
Mis entrañas° son como vino sin respiradero, Como odres nuevos, que están por reventar.
Está dentro de mí como un vino que fermenta, que haría reventar los odres nuevos.