Pues no he perecido ante las tinieblas, ni la oscuridad ha cubierto mi rostro.
¿Por qué no fui yo cortado delante de las tinieblas, Ni fue cubierto con oscuridad mi rostro?
No me han destruido las tinieblas que me rodean; ni la densa e impenetrable oscuridad que está por todas partes.
porque no callaba al caer las tinieblas y la oscuridad que envolvió mi rostro.
¡Ojalá me desvaneciera en las tinieblas, Y cubriera mi rostro la oscuridad!
pues no son las tinieblas las que me angustian, ni la oscuridad la que cubre mi rostro.