2 Reyes 4:41 - Biblia Nacar-Colunga

⁴¹ Elíseo dijo: “Traed harina.” El la echó en la olla, y dijo: “Servid a esas gentes; que coman.” Y ya no había en la olla nada de malo.'

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁴¹ Él entonces dijo: Traed harina. Y la esparció en la olla, y dijo: Da de comer a la gente. Y no hubo más mal en la olla.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴¹ Eliseo les dijo: «Tráiganme un poco de harina». Entonces la arrojó en la olla y dijo: «Ahora está bien, sigan comiendo». Y ya no les hizo daño.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴¹ El les dijo: 'Tráiganme harina'. La echó en la olla y añadió: 'Sírvan sopa a los hombres y que coman'. Y ya no había nada venenoso en la olla.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴¹ Pero él dijo: Traedme harina. Y la echó en la olla y dijo: Sirve a la gente para que coma. Y no hubo nada malo en la olla.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴¹ Él dijo entonces: 'Traedme harina'. Y la echó en la olla. Luego dijo: 'Servid a la gente y que coman'. Y no hubo ya nada malo en la olla.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁴¹ Él entonces dijo: Traed harina. Y la esparció en la olla, y dijo: Da de comer a la gente. Y no hubo más mal en la olla.

2 Reyes 4:41 Referencias Cruzadas

2 Reyes 2:21

y” yendo a la fuente de las aguas, echó en ella la sal, diciendo: “Así dice Yahvé: Yo saneo estas aguas y no saldrá de ellas en adelante ni muerte ni esterilidad”;'

2 Reyes 5:10

Elíseo le mandó a decir por un mensajero: “Ve y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne sanará y quedarás puro.”

2 Reyes 6:6

Y el hombre de Dios le preguntó: “¿Dónde ha caído?” El le indicó el lugar, y Elíseo, cortando un trozo de madera, lo arrojó al mismo lugar, y el hierro sobrenadó.

Éxodo 15:25

Moisés clamó a Yahvé, que le indicó un madero que él echó en el agua, y ésta se endulzó. Allí dio al pueblo leyes y le puso a prueba.

Juan 9:6

Diciendo esto, escupió en el suelo, hizo con saliva un poco de lodo y untó con él los ojos,

Hechos 28:5

Pero él sacudió el reptil sobre el fuego y no le vino mal alguno,

1 Corintios 1:25

Porque la locura de Dios es más sabia que los hombres, y la flaqueza de Dios más poderosa que los hombres.