El escudero de Saúl, viéndole muerto, se echó también sobre su espada, y murió.
Cuando su escudero vio a Saúl muerto, él también se echó sobre su espada y se mató.
Cuando su escudero vio que Saúl estaba muerto, se echó sobre su propia espada y murió.
Viendo el escudero que Saúl había muerto se arrojó también él sobre su espada y murió.
Viendo que Saúl moría, su escudero también se echó sobre la espada, y murió.
Al ver el escudero que Saúl estaba muerto, se dejó caer también él sobre su espada y murió junto a él.