Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Juan 3:15 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

15 para que todo aquel que en él creyere, no se pierda, sino que tenga vida eterna.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

15 para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

15 para que todo el que crea en él tenga vida eterna.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

15 y entonces todo el que crea en él tendrá por él vida eterna.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

15 para que todo el que cree en Él° tenga vida eterna.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

15 para que todo el que cree en él tenga vida eterna.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

15 para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Ver Capítulo Copiar




Juan 3:15
37 Referencias Cruzadas  

Y acontecerá en aquel tiempo, que la Raíz de Jessé, la cual estará puesta por pendón a los gentiles, será buscada de los gentiles; y su Reino de paz será glorioso.


Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay más.


Y Moisés hizo una serpiente de metal, y la puso sobre la bandera, y fue, que cuando alguna serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de metal, y vivía.


Mirad que no tengáis en poco a alguno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre la faz de mi Padre que está en los cielos.


E irán éstos al tormento eterno, y los justos a la vida eterna.


El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.


Porque el Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.


Mas a todos los que le recibieron, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios, a los que creen en su Nombre;


Estas cosas os he hablado, para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis apretura; mas confiad, yo he vencido al mundo.


Estas empero son escritas, para que creáis que Jesús es el Cristo, Hijo de Dios; y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.


Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.


El que cree en el Hijo, tiene vida eterna; mas el que al Hijo es incrédulo, no verá la vida, sino que la ira de Dios permanece sobre él.


De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a juicio, mas pasó de muerte a vida.


Trabajad no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del hombre os dará; porque a éste señaló el Padre, que es Dios.


Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.


De cierto, de cierto os digo: El que cree en mí, tiene vida eterna.


Mirad, oh menospreciadores, y entonteceos, y desvaneceos; porque yo hago una obra en vuestros días, obra que no creeréis, si alguien os la contare.


Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua; y dijo el eunuco: He aquí agua; ¿qué impide que yo sea bautizado?


para que, de la manera que el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna por Jesús, el Cristo, Señor nuestro.


Porque la Palabra del madero a la verdad es locura a los que se pierden; mas a los que se salvan, es a decir, a nosotros, es potencia de Dios.


Que si nuestro Evangelio está encubierto, a los que se pierden está encubierto;


sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesús, el Cristo, nosotros también hemos creído en Jesús, el Cristo, para que fuésemos justificados por la fe de Cristo, y no por las obras de la ley; por cuanto por las obras de la ley ninguna carne será justificada.


Con Cristo estoy juntamente colgado en el madero, y vivo, no ya yo, sino vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo por la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, y se entregó a sí mismo por mí.


Pero nosotros no somos tales que nos retiremos para perdición, sino fieles para ganancia del alma.


por lo cual puede también salvar eternamente a los que por él se allegan a Dios, viviendo siempre para rogar por ellos.


Y esta es la Promesa, la cual él nos prometió, que es vida eterna.


Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios; y cualquiera que ama al que engendró, ama también al que es nacido de él.


Pero sabemos que el Hijo de Dios es venido, y nos ha dado entendimiento; para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesús, el Cristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos