8 (10) Pero yo soy como un olivo verde en el templo de Dios; ¡siempre confiaré en su amor!
Pero yo estoy como olivo verde en la casa de Dios; En la misericordia de Dios confío eternamente y para siempre.
Pero yo soy como un olivo que florece en la casa de Dios y siempre confiaré en su amor inagotable.
Los buenos lo verán y temerán y dirán riéndose de él:
Pero yo estaré como olivo frondoso en la Casa de Dios, Porque en la misericordia de Dios confío eternamente y para siempre.
Cuando el justo lo vea, temerá y hará burla de él: