Lo que el Padre me ha dado es más grande que todo, y nadie se lo puede quitar.
Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.
porque mi Padre me las ha dado, y él es más poderoso que todos. Nadie puede quitarlas de la mano del Padre.
Aquello que el Padre me ha dado es más fuerte que todo, y nadie puede arrebatarlo de la mano de mi Padre.
Lo° que me ha dado mi Padre es mayor que todas las cosas, y nadie puede arrebatarlo de la mano del Padre.
Mi Padre, que me las ha confiado, es superior a todos, y nadie puede arrebatarlas de las manos del Padre.