«Yo soy puro e inocente, y no tengo falta ni pecado.
Yo soy limpio y sin defecto; Soy inocente, y no hay maldad en mí.
Dijiste: “Yo soy puro; no tengo pecado; soy inocente; no tengo culpa.
Soy puro, no tengo pecado; estoy limpio y en mí no hay culpa.
Limpio soy, sin transgresión. Soy puro, y no hay iniquidad en mí.
Limpio estoy, sin pecado, no tengo mancha ni culpa;