Dios no ha puesto bajo la autoridad de los ángeles ese mundo futuro del cual estamos hablando.
Porque no sujetó a los ángeles el mundo venidero, acerca del cual estamos hablando;
Es más, no son los ángeles quienes gobernarán el mundo futuro del cual hablamos,
En efecto, Dios no sometió a ángeles el mundo nuevo del cual estamos hablando.
Porque no ha sometido a los ángeles el mundo venidero, acerca del cual hablamos.
Porque no fue a unos ángeles a los que sometió el mundo futuro del que venimos hablando.