—Eso no depende de mí —contestó José—; pero Dios le dará a Su Majestad una contestación para su bien.
Respondió José a Faraón, diciendo: No está en mí; Dios será el que dé respuesta propicia a Faraón.
—No está en mis manos el poder para hacerlo —respondió José—, pero Dios puede decirle lo que su sueño significa y darle tranquilidad.
José respondió: 'No soy yo, sino Dios quien te dará una respuesta favorable.
José respondió a Faraón, diciendo: No es mérito mío, es ’Elohim quien dará a Faraón respuesta satisfactoria.
Respondió José al Faraón: 'No yo; Dios será el que dé una interpretación favorable al Faraón'.