Además, Labán le regaló a Lía una de sus esclavas, llamada Zilpá, para que la atendiera.
Y dio Labán su sierva Zilpa a su hija Lea por criada.
(Labán le había dado a Lea una sierva, Zilpa, para que la atendiera).
Labán dió a Lía su propia esclava Zilpá, para que fuera sirvienta de ella.
(Y Labán había entregado su sierva Zilpa a su hija Lea como criada.)
Además Labán dio a Lía, su hija, por criada, a su sierva Zilpá.