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Juan 4:1 - Dios Habla Hoy Versión Española

1 Los fariseos oyeron decir que Jesús tenía más seguidores y bautizaba más que Juan

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

1 Cuando, pues, el Señor entendió que los fariseos habían oído decir: Jesús hace y bautiza más discípulos que Juan

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Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Jesús sabía que los fariseos se habían enterado de que él hacía y bautizaba más discípulos que Juan

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Biblia Católica (Latinoamericana)

1 El Señor se enteró de que los fariseos tenían noticias de él; se decía que Jesús bautizaba y atraía más discípulos que Juan,

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La Biblia Textual 3a Edicion

1 Cuando Jesús° se enteró de que los fariseos habían oído decir: Jesús hace y bautiza más discípulos que Juan

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Cuando supo el Señor que los fariseos estaban informados de que Jesús conseguía más discípulos que Juan y que los bautizaba -

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Juan 4:1
15 Referencias Cruzadas  

En cuanto a ti, hijito mío, serás llamado profeta del Dios altísimo, porque irás delante del Señor preparando sus caminos,


Si alguien os pregunta por qué lo desatáis, respondedle que el Señor lo necesita.


Ellos contestaron: –Porque el Señor lo necesita.


Hoy os ha nacido en el pueblo de David un salvador, que es el Mesías, el Señor.


Al verla, el Señor tuvo compasión de ella y le dijo: –No llores.


y los envió a Jesús, a preguntarle si él era el que había de venir o si debían esperar a otro.


Después de esto, Jesús fue con sus discípulos a la región de Judea, donde pasó algún tiempo con ellos, bautizando.


y fueron a decirle a Juan: –Maestro, el que estaba contigo al oriente del Jordán, aquel de quien nos hablaste, ahora está bautizando y todos le siguen.


Dios habló a los descendientes de Israel anunciando el mensaje de paz por medio de Jesucristo, que es el Señor de todos.


Cristo no me envió a bautizar, sino a anunciar el evangelio, y esto sin alardes de sabiduría, para no quitar valor a la muerte de Cristo en la cruz.


El primer hombre, hecho de tierra, procede de la tierra; el segundo hombre procede del cielo.


Eso no lo han entendido los gobernantes de este mundo, pues si lo hubieran entendido no habrían crucificado al Señor de la gloria.


No nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor; nosotros nos declaramos simplemente servidores vuestros por amor a Jesús.


Hermanos míos, vosotros que creéis en nuestro glorioso Señor Jesucristo no debéis hacer diferencias entre unas personas y otras.


En su manto y sobre el muslo llevaba escrito este título: “Rey de reyes y Señor de señores”.


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