Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





Juan 15:4 - Dios Habla Hoy Versión Española

4 Seguid unidos a mí como yo sigo unido a vosotros. Un sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no está unido a la vid. De igual manera, vosotros no podéis dar fruto si no permanecéis unidos a mí.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Pues una rama no puede producir fruto si la cortan de la vid, y ustedes tampoco pueden ser fructíferos a menos que permanezcan en mí.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 pero permanezcan en mí como yo permanezco en ustedes. Una rama no puede producir fruto por sí misma si no permanece unida a la vid; tampoco ustedes pueden producir fruto si no permanecen en mí.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

4 Permaneced en mí, y Yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Permaneced en mí como yo en vosotros. Del mismo modo que el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no está unido a la vid, así tampoco vosotros si no estáis unidos en mí.

Ver Capítulo Copiar




Juan 15:4
29 Referencias Cruzadas  

¿Quién es esta que viene del desierto recostada sobre el hombro de su amado? Bajo un manzano interrumpí tu sueño: allí donde tu madre tuvo dolores, allí donde tu madre te dio a luz.


Efraín dirá: ‘¿Qué me importan ya los ídolos?’ ¡Yo soy quien atiendo y cuido a mi pueblo! Yo soy como un pino siempre verde, y en mí encontrará mi pueblo su fruto.”


“O dais por bueno el árbol y por bueno el fruto, o dais por malo el árbol y por malo el fruto, pues por el fruto se conoce el árbol.


Pero la semilla que cayó en buena tierra representa a las personas que con corazón bueno y dispuesto oyen el mensaje y lo guardan, y permaneciendo firmes dan una buena cosecha.


En aquel día os daréis cuenta de que yo estoy en mi Padre, y que vosotros estáis en mí y yo en vosotros.


yo en ellos y tú en mí, para que lleguen a ser perfectamente uno y así el mundo sepa que tú me enviaste y que los amas como me amas a mí.


El que come mi cuerpo y bebe mi sangre vive unido a mí, y yo vivo unido a él.


Jesús dijo a los judíos que habían creído en él: –Si os mantenéis fieles a mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;


Al llegar, Bernabé vio cómo Dios los había bendecido, y se alegró mucho. Animó a todos a que con corazón firme siguieran fieles al Señor.


En estos lugares animaron a los creyentes, a quienes, recomendándoles que siguieran firmes en la fe, les decían que para entrar en el reino de Dios hay que sufrir muchas aflicciones.


Examinaos a vosotros mismos y ved si estáis firmes en la fe. Poneos a prueba. ¿No os dais cuenta de que Jesucristo está en vosotros? ¡A menos que hayáis fracasado en la prueba!


y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí. Y la vida que ahora vivo en el cuerpo, la vivo por mi fe en el Hijo de Dios, que me amó y se entregó a la muerte por mí.


y que Cristo viva en vuestro corazón por la fe. Así, firmes y profundamente enraizados en el amor,


pues entonces presentaréis una abundante cosecha de buenas acciones gracias a Jesucristo, para honra y gloria de Dios.


Pero para esto debéis permanecer firmemente fundados en la fe, sin apartaros de la esperanza contenida en el mensaje del evangelio que oísteis. Este es el mensaje que se ha anunciado por todas partes en el mundo, y que yo, Pablo, ayudo a predicar.


A estos, Dios les quiso dar a conocer la gloriosa riqueza que ese designio encierra para los no judíos. Y ese designio secreto es Cristo, que habita en vosotros y que es la esperanza de la gloria que habéis de recibir.


Por eso, así como aceptasteis al Señor Jesucristo, así también debéis vivir unidos a él,


Por eso, no pudiendo resistir más, os envié a Timoteo para saber cómo andabais respecto de vuestra fe, pues tenía miedo de que el diablo os hubiera empujado al mal y que nuestro trabajo hubiera resultado inútil.


Nosotros, sin embargo, no somos de los que se vuelven atrás y van a su condenación, sino de los que alcanzan la salvación porque tienen fe.


El que dice que está unido a Dios, debe vivir como vivió Jesucristo.


Cualquiera que pretenda ir más allá de lo que Cristo enseñó, no tiene a Dios; pero el que permanece en esa enseñanza, tiene al Padre y también al Hijo.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios