aunque bramen y se agiten sus aguas, aunque tiemblen los montes con creciente enojo. (Selah)
Aunque bramen y se turben sus aguas, Y tiemblen los montes a causa de su braveza. Selah
¡Que rujan los océanos y hagan espuma! ¡Que tiemblen las montañas mientras suben las aguas!
aunque sus aguas rujan y se encrespen y los montes a su ímpetu retiemblen: El Señor Sabaot está con nosotros, es nuestro baluarte el Dios de Jacob.
Por eso no tememos si la tierra se muda, si los montes se desploman en el mar,