No temeré a los diez millares de enemigos que se han puesto en derredor contra mí.
No temeré a diez millares de gente, Que pusieren sitio contra mí.
No tengo miedo a los diez mil enemigos que me rodean por todas partes.
No le temo al pueblo que me rodea, que por todas partes me amenaza.
No temeré a decenas de millares° de gente Que pongan sitio contra mí.
Yo me acuesto, me duermo y me despierto, y él me responde desde su monte santo.