Los que abandonan la ley alaban a los impíos, pero los que guardan la ley luchan contra ellos.
Los que dejan la ley alaban a los impíos; Mas los que la guardan contenderán con ellos.
Rechazar la ley es enaltecer a los perversos; obedecer la ley es luchar contra ellos.
Los que abandonaron la ley aplauden al malvado, los que observan la Ley se indignan contra él.
Los que abandonan la Ley alaban al impío, Los que guardan la Ley rompen con ellos.
Quien abandona la ley ensalza al malvado, quien observa la ley rompe con él.