Sea que esté sobre la cama o sobre aquello en lo cual ella se haya sentado, el que lo toque quedará inmundo hasta el atardecer.
Y lo que estuviere sobre la cama, o sobre la silla en que ella se hubiere sentado, el que lo tocare será inmundo hasta la noche.
Esto incluye la cama o cualquier objeto sobre el que ella se haya sentado; si alguien lo toca, quedará impuro hasta el anochecer.
Quien toque algo que se puso sobre el lecho o sobre el mueble donde ella se ha sentado quedará impuro hasta la tarde.
Y si hubiere alguna cosa encima del lecho o encima del objeto sobre el cual ella se haya sentado, al tocarlo uno quedará impuro hasta la tarde.
Quien toque cualquier objeto que hubiera en su lecho o en su asiento será impuro hasta la tarde.