el conejo, porque aunque rumia, no tiene pezuña dividida; será inmundo para vosotros;
Asimismo la liebre, porque rumia, pero no tiene pezuña, la tendréis por inmunda.
La liebre rumia, pero no tiene pezuñas partidas, así que es impura.
Lo mismo la liebre.
Y la liebre, porque rumia, pero no tiene pezuña hendida, será impura para vosotros.
la liebre, que rumia, pero no tiene hendida la pezuña, será impura para vosotros;