Pero quiero hablar al Todopoderoso, y deseo argumentar con Dios.
Mas yo hablaría con el Todopoderoso, Y querría razonar con Dios.
En cuanto a mí, hablaría directamente con el Todopoderoso; quiero defender mi caso ante Dios mismo.
Pero yo quisiera hablarle al Todopoderoso y echárselo en cara a Dios.
Pero en verdad, a quien yo me dirijo es a ’El-Shadday, Porque quiero disputar con Dios,
Pero yo me dirijo a Sadday; es con Dios con quien quiero discutir.