Y el ojo no puede decir a la mano: No te necesito; ni tampoco la cabeza a los pies: No os necesito.
Ni el ojo puede decir a la mano: No te necesito, ni tampoco la cabeza a los pies: No tengo necesidad de vosotros.
El ojo nunca puede decirle a la mano: «No te necesito». La cabeza tampoco puede decirle al pie: «No te necesito».
El ojo no puede decir a la mano: 'No te necesito'. Ni tampoco la cabeza decir a los pies: 'No los necesito'.
y no puede el ojo decir a la mano: No te necesito, ni tampoco° la cabeza a los pies: No tengo necesidad de vosotros.
El ojo no puede decirle a la mano: 'No te necesito'; ni tampoco la cabeza a los pies: 'No os necesito'.