Tú dices que Dios no se enoja ni castiga,y que no se da cuenta de tanta maldad;
Mas ahora, porque en su ira no castiga, Ni inquiere con rigor,
Dices que Dios no responde con enojo a los pecadores y que no le importa mucho la perversidad.
Lo mismo si dices que su enojo no sabe castigar y que no se entera de los abusos.
Pero ahora, por cuanto aún° no visita con su ira, Ni toma pronto conocimiento de las trasgresiones,
o también, que su cólera nada castiga, que no se preocupa gran cosa del pecado