Vosotros odiáis al que defiende la justicia en el tribunaly detestáis al que dice la verdad.
Ellos aborrecieron al reprensor en la puerta de la ciudad, y al que hablaba lo recto abominaron.
¡Cómo odian ustedes a los jueces honestos! ¡Cómo desprecian a los que dicen la verdad!
¡Ay de ustedes, que transforman las leyes en algo tan amargo como el ajenjo y tiran por el suelo la justicia!
°Que en la puerta° aborrecen al que amonesta, Y detestan al que habla rectamente.
odian al testigo en el juicio y detestan al que habla rectamente!