Pues bien, si aquel ministerio fue así, ¿no será todavía más glorioso el ministerio del Espíritu?
¿cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu?
¿No deberíamos esperar mayor gloria dentro del nuevo camino, ahora que el Espíritu Santo da vida?
¡Qué gloria tan grande no les esperará, entonces, a los que comunican el Espíritu!
¿cómo no será con más gloria el ministerio del Espíritu?
¿cuánto más glorioso será el ministerio del espíritu?