Proverbios 8:24 - La Biblia Textual 3a Edicion

²⁴ Antes de los abismos yo estaba engendrada, Antes que fueran las fuentes de las muchas aguas.

Още версии

Biblia Reina Valera 1960

²⁴ Antes de los abismos fui engendrada; Antes que fuesen las fuentes de las muchas aguas.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁴ Nací antes de que los océanos fueran creados, antes de que brotara agua de los manantiales.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁴ Aún no existían los océanos cuando yo nací, no había fuente alguna de donde brotaran los mares.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁴ Nací cuando no existían los abismos, cuando no había fuentes bulliciosas.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²⁴ Antes de los abismos fui engendrada; antes que fuesen las fuentes de las muchas aguas.

Proverbios 8:24 Кръстосани препратки

Génesis 1:2

Pero la tierra llegó a estar desolada° y vacía, y había tinieblas sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se cernía° sobre la faz de las aguas.

Job 38:16

¿Has penetrado tú hasta los manantiales del mar, O te has paseado por las profundidades del abismo?

Salmos 2:7

Yo promulgaré el decreto: YHVH me ha dicho: Mi hijo eres Tú, Yo te he engendrado° hoy.

Éxodo 15:5

Los abismos los cubrirán, Como piedra descendieron A las profundidades.

Proverbios 3:20

Y por su ciencia fueron divididos los abismos, Y las nubes destilan el rocío.

Juan 1:14

Y el Logos se hizo carne, y tabernaculizó° entre nosotros, y contemplamos su gloria (gloria como del Unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.

Juan 3:16

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Juan 5:20

Porque el Padre ama al Hijo y le muestra todo lo que Él hace; y mayores obras que éstas le mostrará, para que vosotros os maravilléis.

Hebreos 1:5

Porque ¿a cuál de los ángeles dijo° jamás: Mi hijo eres tú, Yo te he engendrado hoy;° Y otra vez: Yo seré su Padre, y Él será mi hijo?°

1 Juan 4:9

En esto fue manifestado el amor de Dios en° nosotros: En que Dios envió al mundo a su Hijo unigénito, para que vivamos por medio de Él.