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Salmos 128:1 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

1 1 (1b) ¡Dios bendice a todos los que lo obedecen y siguen sus enseñanzas!

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অধিক সংস্কৰণ

Biblia Reina Valera 1960

1 Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová, Que anda en sus caminos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

1 ¡Qué feliz es el que teme al Señor, todo el que sigue sus caminos!

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Biblia Católica (Latinoamericana)

1 Felices los que temen al Señor y siguen sus caminos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

1 Cántico gradual. ¡Cuán bienaventurado es el que teme a YHVH, Y anda en sus caminos!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Canto gradual. Dichosos los que temen al Señor y van por sus caminos.

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Salmos 128:1
24 পৰস্পৰ সংযোগসমূহ  

Dios, tú bendices a los que van por buen camino, a los que de todo corazón siguen tus enseñanzas.


¡Alabemos a nuestro Dios! ¡Dios bendice a quienes lo adoran y gozan cumpliendo sus mandamientos!


ȃl nunca deja de amar a todos los que lo adoran.


Con quienes lo honran, Dios es tan tierno como un padre con sus hijos.


En las regiones de Judea, Galilea y Samaria, los miembros de la iglesia vivían sin miedo de ser maltratados. Seguían adorando al Señor, y cada día confiaban más en él. Con la ayuda del Espíritu Santo, cada vez se unían más y más personas al grupo de seguidores del Señor Jesús.


para él, lo que cuenta es que la gente lo obedezca y confíe en su amor.


1 (1b) Si Dios no construye la casa, de nada sirve que se esfuercen los constructores. Si Dios no vigila la ciudad, de nada sirve que se desvelen los vigilantes.


y bendice a quienes lo adoran, sean o no gente importante.


Queridos hermanos en Cristo, nosotros les hemos enseñado a vivir como a Dios le agrada, y ustedes en verdad viven así. Ahora les rogamos y los animamos, de parte del Señor Jesús, a que se esfuercen cada vez más por seguir viviendo así.


En cambio, el amor de Dios siempre será el mismo; Dios ama a quienes lo honran, y siempre les hace justicia a sus descendientes,


1 (1b) Los que confían en Dios son como el monte Sión, que nadie puede moverlo. ¡Permanecerán para siempre!


1 (1b) Dios mío, cuando me siento angustiado, te llamo y tú me respondes.


Ellos no hacen nada malo: solo a ti te obedecen.


Isabel y Zacarías eran muy buenos y obedecían todos los mandamientos de Dios.


1 (1b) Dirijo la mirada a las montañas; ¿de dónde vendrá mi ayuda?


1 (1b) Si Dios no nos hubiera ayudado, ¿qué habría sido de nosotros? ¡Todos en Israel lo sabemos!


1 (1b) ¡Con todas las fuerzas de mi ser alabaré a mi Dios!


1 (1b) Cuando Dios nos hizo volver de Babilonia a Jerusalén, creíamos estar soñando.


13 (14) »¡Cómo me gustaría que mi pueblo me escuchara! ¡Cómo quisiera que Israel hiciera lo que yo quiero!


1-2 (1b-2) Dios, rey de los cielos, de ti dependemos, como dependen los esclavos de la compasión de sus amos. Dios nuestro, de ti dependemos y esperamos que nos tengas compasión.


1 (1b) Me da gusto que me digan: «¡Vamos al templo de Dios!»


»Dios los bendecirá dondequiera que vivan, sea en el campo o en la ciudad.


Yo obedezco tus enseñanzas y no me aparto de ti.


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