Biblia Todo Logo
অনলাইন বাইবেল

- বিজ্ঞাপন -





Marcos 14:65 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

65 Algunos empezaron a escupir a Jesús. Le tapaban los ojos, lo golpeaban y le decían: «¡Adivina quién te pegó!» Luego, los soldados del templo se hicieron cargo de Jesús y lo recibieron a bofetadas.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক


অধিক সংস্কৰণ

Biblia Reina Valera 1960

65 Y algunos comenzaron a escupirle, y a cubrirle el rostro y a darle de puñetazos, y a decirle: Profetiza. Y los alguaciles le daban de bofetadas.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Nueva Traducción Viviente

65 Entonces algunos comenzaron a escupirle, y le vendaron los ojos y le daban puñetazos. «¡Profetízanos!», se burlaban. Y los guardias lo abofeteaban mientras se lo llevaban.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Católica (Latinoamericana)

65 Después algunos empezaron a escupirle. Le cubrieron la cara y le golpeaban antes de decirle: '¡Hazte el profeta!' Y los policías del Templo lo abofeteaban.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

La Biblia Textual 3a Edicion

65 Y algunos comenzaron a escupirlo, a cubrirle el rostro, a darle puñetazos y a decirle: ¡Profetiza!° También los guardias lo recibieron a bofetadas.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Serafín de Ausejo 1975

65 Entonces algunos se pusieron a escupirle y a darle puñetazos, tapándole la cara, mientras le decían: '¡Haz de profeta!'. Y los criados la emprendieron con él a bofetadas.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক




Marcos 14:65
17 পৰস্পৰ সংযোগসমূহ  

Entonces Ananías, el jefe de los sacerdotes, ordenó que golpearan a Pablo en la boca.


y, acercándose a él, dijeron: «¡Viva el rey de los judíos!» Y lo golpeaban en la cara.


»No quité mi espalda a los que me golpeaban, ni escondí mis mejillas de los que me arrancaban la barba; ni me cubrí la cara cuando me escupían y se burlaban de mí.


Cuando Jesús dijo esto, uno de los guardias del templo lo golpeó en la cara y le dijo: —¡Esa no es manera de contestarle al jefe de los sacerdotes!


Lo golpeaban en la cabeza con una vara y lo escupían, y arrodillándose delante de él le hacían reverencias.


Todos lo despreciaban y rechazaban. Fue un hombre que sufrió el dolor y experimentó mucho sufrimiento. Todos evitábamos mirarlo; lo despreciamos y no lo tuvimos en cuenta.


»Muchos se asombrarán al verlo, por tener la cara desfigurada, y no parecer un ser humano.


¡Me escupen en la cara, y con asco se apartan de mí!


Cuando el rey regresó del jardín y entró a la sala, vio que Amán estaba demasiado cerca de Ester. Entonces el rey exclamó: —¡Solo eso me faltaba! ¡Que le faltes al respeto a mi esposa ante mis ojos, y en mi propia casa! Cuando los guardias oyeron los gritos del rey, entraron y le cubrieron la cara a Amán. Uno de los guardias, llamado Harboná, dijo: —En la casa de Amán hay una horca de veintidós metros de alto. Él la preparó para Mardoqueo, el judío que le salvó la vida a Su Majestad.


y Dios le contestó: —Si su padre le hubiera escupido en la cara, sería tal su vergüenza que ella tendría que quedarse siete días fuera del campamento. Pues bien, ese será su castigo.


Pongamos toda nuestra atención en Jesús, pues de él viene nuestra confianza, y es él quien hace que confiemos cada vez más y mejor. Jesús soportó la vergüenza de morir clavado en una cruz porque sabía que, después de tanto sufrimiento, sería muy feliz. Y ahora se ha sentado a la derecha del trono de Dios.


para que se burlen de mí, y para que me escupan en la cara y me maten; pero después de tres días resucitaré.»


1 (4.14) Yo, Miqueas, anuncio: «Jerusalén, Jerusalén, prepárate para la guerra. Por medio de tus enemigos Dios castigará duramente al rey de Israel.


Entonces Sedequías hijo de Quenaaná se acercó, le dio a Micaías una bofetada en la cara y le dijo: —¿Cómo te atreves a decir que el espíritu de Dios me ha abandonado, y que te ha hablado a ti?


Lo escupían y, con la misma vara que le habían dado, le pegaban en la cabeza.


আমাক অনুসৰণ কৰক:

বিজ্ঞাপন


বিজ্ঞাপন