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Lucas 15:6 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

6 y vuelve muy contento con ella. Después llama a sus amigos y vecinos, y les dice: “¡Vengan a mi casa y alégrense conmigo! ¡Ya encontré la oveja que había perdido!”

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অধিক সংস্কৰণ

Biblia Reina Valera 1960

6 y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Cuando llegue, llamará a sus amigos y vecinos y les dirá: “Alégrense conmigo porque encontré mi oveja perdida”.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 y al llegar a su casa reúne a los amigos y vecinos y les dice: 'Alégrense conmigo, porque he encontrado la oveja que se me había perdido.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 y regresando a la casa, reúne a los amigos y a los vecinos, y les dice: ¡Alegraos conmigo, pues hallé mi oveja perdida!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 y apenas llega a casa, reúne a los amigos y vecinos, y les dice: Alegraos conmigo; que ya encontré la oveja que se me había perdido.

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Lucas 15:6
19 পৰস্পৰ সংযোগসমূহ  

»De la misma manera, los ángeles de Dios hacen fiesta cuando alguien se vuelve a Dios.»


porque mi hijo ha regresado! Es como si hubiera muerto, y ha vuelto a vivir. Se había perdido y lo hemos encontrado.” »Y comenzó la fiesta.


Antes, ustedes andaban como ovejas perdidas, pero ahora han regresado a Cristo, que es como un pastor que los cuida y los protege.


Bernabé era un hombre bueno, que tenía el poder del Espíritu Santo y confiaba solamente en el Señor. Cuando Bernabé llegó y vio que Dios había bendecido a toda esa gente, se alegró mucho y los animó para que siguieran siendo fieles y obedientes al Señor. Y fueron muchos los que escucharon a Bernabé y obedecieron el mensaje de Dios.


Ando como oveja perdida; ven a buscarme, pues te pertenezco y tengo presentes tus mandamientos.


Ustedes confían en Dios y le sirven, y eso es como si le presentaran una ofrenda. Tal vez a mí me maten, y entonces mi muerte será parte de esa ofrenda a Dios. Si esto llega a suceder, seré muy feliz, y quiero compartir esa alegría con ustedes.


En su camino a Jerusalén pasaron por las regiones de Fenicia y Samaria. Allí les contaron a los cristianos judíos que mucha gente no judía había decidido seguir a Dios. Al oír esta noticia, los cristianos judíos se alegraron mucho.


Ustedes son mis amigos, si hacen lo que les mando.


»En una boda, el que se casa es el novio, y el mejor amigo del novio se llena de alegría con solo escuchar su voz. Así de alegre estoy ahora, porque el Mesías está aquí.


»De la misma manera, hay más alegría allá en el cielo por una de estas personas que se vuelve a Dios, que por noventa y nueve personas buenas que no necesitan volverse a él.»


Antes, ustedes no eran nada, pero ahora son el pueblo de Dios. Antes, Dios no les tenía compasión, pero ahora los ama mucho.


Teníamos deseos de verlos, pues cuando nuestro Señor Jesús regrese y nos pida cuentas, nos sentiremos orgullosos, felices y seguros de nuestro trabajo por ustedes.


Queridos hermanos y amigos, estoy muy contento y orgulloso de ustedes. ¡Realmente los extraño! ¡No dejen de confiar en el Señor Jesús!


y cuando oro, siempre pido con alegría por todos,


todos sus vecinos y familiares se alegraron mucho, pues vieron que Dios había sido muy bondadoso.


Y cuando la encuentra, la pone en sus hombros


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