Hechos 25:4 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

^4-5 Pero Festo les dijo: —No; Pablo seguirá preso en Cesarea, y muy pronto yo iré para allá. Si él ha hecho algo malo y las autoridades de ustedes quieren acusarlo, que vengan conmigo. Allá podrán acusarlo.

অধিক সংস্কৰণ

Biblia Reina Valera 1960

⁴ Pero Festo respondió que Pablo estaba custodiado en Cesarea, adonde él mismo partiría en breve.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ Pero Festo respondió que Pablo estaba en Cesarea y que pronto él mismo iba a regresar allí.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ Festo les respondió que Pablo estaba bajo custodia en Cesarea y que él volvería muy pronto allá.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ Pero Festo respondió que Pablo estaba custodiado en Cesarea, adonde él mismo° iba a partir en breve.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ Pero Festo les respondió que Pablo seguiría bajo custodia en Cesarea y que él estaba a punto de partir en breve.

Hechos 25:4 পৰস্পৰ সংযোগসমূহ

Hechos 24:23

Luego, Félix le ordenó al capitán de los soldados que mantuviera preso a Pablo, pero que lo dejara hacer algunas cosas. Además, dio permiso para que Pablo recibiera a sus amigos y lo atendieran.

Hechos 8:40

Más tarde, Felipe apareció en la ciudad de Azoto y se dirigió a la ciudad de Cesarea. Y en todos los pueblos por donde pasaba, anunciaba las buenas noticias acerca de Jesús.

Hechos 24:27

Dos años después, Félix dejó de ser el gobernador, y en su lugar empezó a gobernar Porcio Festo. Pero Félix quería quedar bien con los judíos; por eso dejó preso a Pablo.

Hechos 25:1

Festo llegó a la ciudad de Cesarea para ocupar su puesto de gobernador. Tres días después se fue a la ciudad de Jerusalén.

Hechos 25:6

Festo se quedó ocho días en Jerusalén, y luego regresó a Cesarea. Al día siguiente fue a la corte, se sentó en la silla del juez, y mandó traer a Pablo.

Hechos 25:13

Pasaron algunos días, y el rey Agripa y Berenice fueron a la ciudad de Cesarea para saludar al gobernador Festo.

Hechos 25:16

Pero les dije que nosotros, los romanos, no acostumbramos ordenar la muerte de nadie sin que esa persona tenga la oportunidad de ver a sus acusadores y defenderse.