Hechos 12:17 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual17 Pedro les hizo señas para que se callaran, y empezó a contarles cómo Dios lo había sacado de la cárcel. También les dijo: «Vayan y cuenten esto a Jacobo y a los demás seguidores de Jesús.» Luego se despidió de todos, y se fue a otro pueblo. অধ্যায়টো চাওকঅধিক সংস্কৰণBiblia Reina Valera 196017 Pero él, haciéndoles con la mano señal de que callasen, les contó cómo el Señor le había sacado de la cárcel. Y dijo: Haced saber esto a Jacobo y a los hermanos. Y salió, y se fue a otro lugar. অধ্যায়টো চাওকBiblia Nueva Traducción Viviente17 Él les hizo señas para que se callaran y les contó cómo el Señor lo había sacado de la cárcel. «Díganles a Santiago y a los demás hermanos lo que pasó», dijo. Y después se fue a otro lugar. অধ্যায়টো চাওকBiblia Católica (Latinoamericana)17 Les hizo señas con la mano pidiendo silencio, y les contó cómo el Señor lo había sacado de la cárcel. En seguida les dijo: 'Comuniquen esto a Santiago y a los hermanos. Luego salió y se fue a otro lugar. অধ্যায়টো চাওকLa Biblia Textual 3a Edicion17 Y haciéndoles con la mano señal de que callaran, relató cómo el Señor lo había sacado de la cárcel. Y dijo: Informad de esto a Jacobo y a los hermanos. Y saliendo, se fue a otro lugar. অধ্যায়টো চাওকBiblia Serafín de Ausejo 197517 Él hizo señas con la mano para que se callaran, les refirió cómo el Señor le había sacado de la cárcel y añadió: 'Contádselo a Santiago y a los hermanos'. Salió y se fue a otro lugar. অধ্যায়টো চাওক |
Santiago, Pedro y Juan, que eran considerados los líderes más importantes de la iglesia, se dieron cuenta de ese privilegio que Dios me había dado. Entonces quedamos de acuerdo en que Bernabé y yo anunciaríamos la buena noticia a los que no son judíos, y que ellos la anunciarían a quienes sí lo son. Y para mostrarnos que estaban de acuerdo, nos dieron la mano.
¿Acaso no es este el carpintero, el hijo de María y hermano de Santiago, José, Judas y Simón? ¿Y no es verdad que sus hermanas viven en este mismo pueblo? Y se quedaron confundidos y contrariados. Por eso, Jesús les dijo: —Al profeta se le reconoce y se le acepta en todas partes, menos en su propio pueblo, en su propia familia y en su propia casa.