Biblia Todo Logo
অনলাইন বাইবেল

- বিজ্ঞাপন -





Hebreos 6:20 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

20 Lo hizo para dejarnos libre el camino hacia Dios, pues Cristo es para siempre el Jefe de sacerdotes, como lo fue Melquisedec.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক


অধিক সংস্কৰণ

Biblia Reina Valera 1960

20 donde Jesús entró por nosotros como precursor, hecho sumo sacerdote para siempre según el orden de Melquisedec.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Nueva Traducción Viviente

20 Jesús ya entró allí por nosotros. Él ha llegado a ser nuestro eterno Sumo Sacerdote, según el orden de Melquisedec.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Católica (Latinoamericana)

20 Allí entró Jesús para abrirnos el camino, hecho sumo sacerdote para siempre a semejanza de Melquisedec.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

La Biblia Textual 3a Edicion

20 donde Jesús entró por nosotros como precursor, hecho Sumo Sacerdote para siempre según el orden de Melquisedec.°

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 donde, como precursor y representante nuestro, entró Jesús, constituido sumo sacerdote para siempre según el rito de Melquisedec.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক




Hebreos 6:20
20 পৰস্পৰ সংযোগসমূহ  

Jesús es el Hijo de Dios, y es nuestro gran Jefe de sacerdotes, que ha subido al cielo. Por eso debemos seguir confiando en él.


Hermanos, Dios los ha llamado a ustedes para que sean su pueblo elegido. Por eso, pónganse a pensar seriamente en quién es Jesús: ¡Él es nuestro apóstol y nuestro Jefe de sacerdotes!


En otra parte de la Biblia también le dijo: «Tú eres sacerdote para siempre, como lo fue Melquisedec.»


Por eso Dios también lo nombró Jefe de sacerdotes, como lo fue Melquisedec.


Porque Cristo no entró en el santuario hecho por seres humanos, que era solo una copia del santuario verdadero. Cristo entró en el cielo mismo, y allí se presenta ante Dios para pedirle que nos perdone.


Cristo no entró a ese santuario para ofrecer a Dios la sangre de animales, sino para ofrecer su propia sangre. Entró una sola vez y para siempre; de ese modo, de una vez por todas nos libró del pecado.


Lo más importante de todo esto es que tenemos un Jefe de sacerdotes que está en el cielo, sentado a la derecha del trono de Dios.


Dios hizo todas las cosas para él mismo, y quiere que su gloria la compartan todos los que lo aman y obedecen. Para eso, Dios tenía que hacer perfecto a Jesucristo y dejarlo morir, pues Jesucristo es el Salvador de ellos.


El Hijo de Dios nos muestra el poder y la grandeza de su Padre. El Hijo de Dios es igual en todo a su Padre, y con su gran poder hace que el universo siga existiendo. El Hijo de Dios logró que Dios nos perdonara nuestros pecados, y después subió al cielo para sentarse a la derecha del trono de su Padre.


¿Puede alguien castigarlos? ¡De ninguna manera, pues Jesucristo murió por ellos! Es más, Jesucristo resucitó, y ahora está a la derecha de Dios, rogando por nosotros.


Hijos míos, les escribo porque Dios les ha perdonado sus pecados por medio de lo que hizo Jesucristo.


subió al cielo y está sentado a la derecha de Dios, en el lugar más importante, y gobierna a todos los ángeles y a todos los seres espirituales que tienen autoridad y poder.


Pongamos toda nuestra atención en Jesús, pues de él viene nuestra confianza, y es él quien hace que confiemos cada vez más y mejor. Jesús soportó la vergüenza de morir clavado en una cruz porque sabía que, después de tanto sufrimiento, sería muy feliz. Y ahora se ha sentado a la derecha del trono de Dios.


Para poder ayudarlos, tenía que hacerse igual a ellos. Por eso Jesús es un Jefe de sacerdotes en quien se puede confiar, pues está lleno de amor para servir a Dios. Además, por medio de su muerte, Jesús logró que Dios nos perdonara nuestros pecados.


Demos gracias al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo por las bendiciones espirituales que Cristo nos trajo del cielo.


Dios ha hecho un juramento, y lo cumplirá: «Tú eres sacerdote para siempre, como lo fue Melquisedec».


Esa ofrenda se la entregarán al sacerdote Aarón.


আমাক অনুসৰণ কৰক:

বিজ্ঞাপন


বিজ্ঞাপন