Hebreos 10:26 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual26 Si seguimos pecando después de haber conocido la verdadera enseñanza de Dios, ningún sacrificio podrá hacer que Dios nos perdone. অধ্যায়টো চাওকঅধিক সংস্কৰণBiblia Reina Valera 196026 Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, অধ্যায়টো চাওকBiblia Nueva Traducción Viviente26 Queridos amigos, si seguimos pecando a propósito después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda ningún sacrificio que cubra esos pecados. অধ্যায়টো চাওকBiblia Católica (Latinoamericana)26 Si pecamos voluntariamente después de haber recibido el pleno conocimiento de la verdad, no puede haber ya sacrificio por el pecado;' অধ্যায়টো চাওকLa Biblia Textual 3a Edicion26 Porque si continuamos pecando voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por el pecado, অধ্যায়টো চাওকBiblia Serafín de Ausejo 197526 Porque si después de haber aceptado el conocimiento de la verdad volvemos a pecar deliberadamente, ya no queda más sacrificio expiatorio por los pecados, অধ্যায়টো চাওক |
Si alguno ve que un hermano de la iglesia comete un pecado que no lleva a la muerte, debe orar por ese hermano, para que Dios le dé vida. Pero debe tratarse de un pecado que no lleve a la muerte. Porque hay pecados que llevan a la muerte, y quiero decirles que no se debe orar por quienes los cometen.
que les diera a los israelitas las siguientes instrucciones: «Cuando alguien me desobedezca sin darse cuenta, se deberá hacer lo siguiente: »Si el que me desobedeció fue el jefe de los sacerdotes, todo el pueblo compartirá la culpa. Para que yo lo perdone, el jefe de los sacerdotes deberá ofrecerme un ternero sin defecto. Lo llevará a la entrada del santuario, pondrá sus manos sobre la cabeza del animal, y lo matará en mi altar. Luego tomará la sangre del ternero y la llevará al interior del santuario, mojará su dedo en la sangre y la rociará siete veces en dirección al cofre de Dios, detrás de la cortina del Lugar Santísimo. »Enseguida el jefe de los sacerdotes pondrá un poco de la sangre en las puntas del altar del incienso aromático, y el resto de la sangre lo derramará sobre la base del altar que está a la entrada del santuario. Luego le quitará al animal todas las partes internas, tal como se hace con el animal que se ofrece para pedir salud y bienestar, y las quemará sobre el altar. El resto del ternero, es decir, el cuero y toda la carne, la cabeza, las patas, los intestinos y el excremento, lo sacará del campamento y lo quemará en el lugar apartado especialmente para echar las cenizas. »Si el que me desobedece es el pueblo entero,